
El incidente ocurrió en pleno vuelo: pasajeros debieron bajar como medida de precaución mientras se investigaba la amenaza
Un pasajero a bordo de un vuelo comercial de la aerolínea Flybondi provocó un alerta de seguridad al gritar la palabra “bomba” durante el trayecto. La tripulación activó los protocolos de emergencia y solicitó el desembarque inmediato de todos los ocupantes del avión.
Una vez en tierra, se desplegó personal de seguridad aeroportuaria y fuerzas policiales para inspeccionar la aeronave. Se realizó un relevamiento minucioso por parte de especialistas en seguridad aérea y equipos de emergencia, a fin de confirmar si había real riesgo o se trataba de una falsa alarma.
Los pasajeros fueron evacuados del avión y asistidos en sala de contingencia mientras se inspeccionaba el interior del aparato en busca de posibles objetos sospechosos. Aunque no se informó el hallazgo de artefactos, el procedimiento demoró la partida del vuelo y generó preocupación entre los pasajeros.
Las autoridades aeronáuticas informaron que se abrirá una investigación para determinar el origen del grito y si podría tratarse de una amenaza creíble, una broma de mal gusto o un acto de provocación. El pasajero en cuestión fue identificado para su interrogatorio e imputaciones si corresponde.
Este tipo de incidentes provoca retrasos, revuelo entre viajeros y la activación de protocolos de seguridad que impactan en la operatividad del aeropuerto. Las aerolíneas suelen colaborar con los organismos de seguridad para esclarecer lo sucedido y reforzar medidas preventivas.
Si bien no hubo heridos ni consecuencias graves informadas, el episodio refleja cuán delicada es la seguridad aérea frente a cualquier amenaza, real o hipotética, y la necesidad de protocolos claros para proteger a los pasajeros y la aeronave.