Tras la conmoción generada por la pérdida de la yaguareté Acaí, un ejemplar de 2 años y 8 meses liberado como parte del proyecto de reintroducción de la especie en El Impenetrable, la provincia del Chaco mantiene una intensa investigación para esclarecer las circunstancias de su muerte. El subsecretario de Ambiente provincial, Mariano Moro, brindó detalles sobre el avance de la causa de índole penal, que ha cobrado relevancia en medios nacionales.
Pérdida de la Señal y Ubicación del Collar
Acaí había sido liberada el pasado 5 de octubre en El Impenetrable y era monitoreada constantemente mediante un collar con sistema de GPS provisto por la Fundación Rewilding Argentina. Este dispositivo registraba su posición cada hora y enviaba datos satelitales cada cuatro horas, permitiendo a los profesionales seguir su ubicación. Sin embargo, el 25 de octubre, el collar de monitoreo dejó de emitir señales. Luego de realizar un intenso operativo de rastrillaje que incluyó búsquedas terrestres y aéreas, el dispositivo fue finalmente ubicado en el río Bermejo.
En diálogo con Diario Chaco, el subsecretario Sebastián Moro indicó que la búsqueda del cuerpo del animal sigue activada. El funcionario señaló que tanto la Policía Rural como la Brigada Operativa Ambiental (BOA) están colaborando activamente con la investigación, pero que «hasta el día de hoy no se la encuentra» a la yaguareté.
Protocolo Activo y Delito Penal
Moro también mencionó que el collar en sí mismo no ha podido ser extraído del río. «Sabemos que viene de ahí porque la Fundación recibe desde ese lugar las señales, pero no pudimos sacarlo», explicó. La confirmación de la señal sumergida en el agua activó los protocolos de búsqueda de manera más rigurosa, e implicó la intervención de la justicia federal debido a que la potencial caza o muerte del yaguareté constituye un delito penal.
Al ser consultado sobre las posibles hipótesis acerca de la cacería de Acaí, el subsecretario explicó que toda la zona está sujeta al control de la BOA y que el monitoreo de Acaí lo realizaba la Fundación con la tecnología necesaria. Señaló que la interrupción inicial de la señal podría haberse debido a factores como las condiciones meteorológicas (mucha lluvia) o que el animal hubiera ingresado en una zona boscosa muy cerrada y de difícil emisión de señal. Sin embargo, la posterior ubicación de la señal sumergida en el agua incrementó la seriedad de la búsqueda.
Querella y Llamado a la Colaboración
Respecto a las acciones legales, el subsecretario Moro reiteró la postura del gobierno de presentarse como querellante. No obstante, aclaró que por el momento: «Lo único que puede imputar por el momento es que falta el cuerpo y vamos a estar sujetos a la investigación». El funcionario garantizó que, si se llega a definir la identidad de quien cometió el delito, esa persona «por supuesto va a ser juzgada y sancionada en base a la responsabilidad que le corresponde».
Finalmente, el subsecretario de Ambiente realizó un llamado a la colaboración ciudadana. Solicitó que cualquier persona que posea información relevante sobre el paradero o las circunstancias de la muerte de Acaí se comunique de inmediato con la línea 105, que es la línea ambiental de la provincia, o con cualquiera de los organismos judiciales, provinciales o nacionales que están interviniendo en la causa.
