
La Fiscalía solicitó que la causa avance a juicio luego de recolectar evidencias sobre bienes y vinculación financiera
La Fiscalía presentó un informe en el que solicita formalmente elevar a juicio la causa que investiga al clan Sena por presunto lavado de activos. Las actuaciones incluyen análisis de patrimonio, operaciones bancarias y movimientos de bienes cuyo origen está siendo cuestionado.
Diversas medidas de prueba ya fueron ejecutadas: se realizaron informes periciales contables, embargos de bienes muebles e inmuebles, y verificaciones cruzadas de cuentas bancarias que vincularían al clan con operaciones de lavado.
La acusación apunta a que miembros de la familia habrían utilizado empresas pantalla y activos inmobiliarios para ocultar origen ilícito de fondos. Se buscan probar la conexión entre esos bienes y delitos previos que estarían en la base del patrimonio sospechoso.
El avance hacia el juicio supone un paso legal importante, ya que podría permitir la imputación formal y la apertura del debate oral, donde se escucharán testigos clave, expertos periciales y defensas de las partes involucradas.
La complejidad del caso ha generado interés público por la magnitud de los activos involucrados y la posibilidad de rastrear redes financieras que operan en la sombra. Las autoridades advierten que casos como este demandan transparencia y firmeza judicial.
Mientras la causa espera la resolución sobre la elevación a juicio, la Fiscalía ha dispuesto medidas cautelares y pidió la intervención de organismos de control para prevenir maniobras de encubrimiento o dilación.