Un operativo policial terminó con la detención de un hombre acusado de sustraer pertenencias del domicilio de su expareja y amenazarla de manera reiterada, incluso con frases que implicaban incendiar la vivienda. La denuncia movilizó a las fuerzas locales y derivó en medidas de protección para la víctima.
El hecho fue denunciado tras la denuncia presentada por la mujer, que relató la sustracción de objetos personales y la existencia de amenazas que generaron temor por su integridad y la de su familia. La denuncia incluyó la referencia a intimidaciones que obligaron a la intervención inmediata de la Policía.
Personal policial realizó un allanamiento en el domicilio del imputado y secuestró elementos vinculados con la causa. El detenido quedó alojado a disposición de la fiscalía correspondiente, que inició la investigación bajo las calificaciones penales por robo y amenazas en contexto de violencia de género.
La fiscalía confirmó la adopción de medidas judiciales para resguardar a la víctima: se dictó prohibición de acercamiento, se orientó sobre mecanismos de denuncia y se ordenaron peritajes sobre los elementos secuestrados. En paralelo, se tomaron declaraciones y se recaban testimonios y registros electrónicos que puedan aportar al esclarecimiento.
Desde organismos locales y organizaciones de apoyo a víctimas recordaron la importancia de denunciar ante el primer episodio de violencia y destacaron la coordinación entre fuerzas y fiscalía para dar respuesta rápida. El caso subraya, además, la necesidad de canales de protección efectivos para personas en situación de riesgo.
La investigación sigue abierta: la fiscalía definirá en los próximos días la imputación formal y las medidas cautelares procesales que correspondan. Mientras tanto, las autoridades locales reforzaron los controles en la zona y reiteraron el llamado a la comunidad para aportar datos que pudieran colaborar con la causa.
