Un operativo de las autoridades en la provincia de Santa Fe culminó con el rescate de 31 trabajadores, incluyendo dos menores de edad, que se encontraban en condiciones de explotación laboral y hacinamiento en dos campos de la localidad de Pozo Borrado. El procedimiento se inició tras una investigación de la fiscalía que determinó que las víctimas vivían en condiciones de precariedad extrema, sin acceso a servicios básicos como agua potable o baños.
Un rescate con fines de explotación laboral
Los trabajadores, originarios de Los Juríes, Santiago del Estero, eran en su mayoría indocumentados y muchos no sabían leer ni escribir. Vivían en campamentos improvisados con toldos de nailon, durmiendo en el suelo y con jornadas laborales de diez horas, de lunes a lunes. Tras el allanamiento, dos personas fueron identificadas y vinculadas a la investigación por el presunto delito de trata de personas con fines de explotación laboral. Las víctimas rescatadas recibieron asistencia por parte de las autoridades y de programas del Ministerio de Justicia de la Nación.
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